Cae la noche, oscura y fría.
Te miro. Tiemblas.
Junto madera y enciendo una fogata.
El fuego crece…
Y junto a él nuestro amor.
Te abrazo y sonríes.
Te sientes protegida.
La noche se puebla de estrellas.
Me pides la Luna…
Y te regalo el universo.
Estas preocupada… Te escucho.
Agradeces que siempre a tu lado.
Te agradezco por permitirlo.
Tu cabeza en mi hombro,
Mi cabeza en la tuya,
Nuestros corazones laten juntos.
El fuego arde…
Oímos ruidos… Sientes miedo.
Intento levantarme… Pero no me dejas.
Me quieres a tu lado.
Me abrazas fuertemente.
A través de las llamas vemos un animal.
Su mirada se clava en nosotros.
Lentamente se aproxima…
El miedo aumenta…
La noche esconde sus estrellas.
Sólo el fuego nos protege.
Ese fuego que nos une.
Sólo ese fuego nos protege.
El animal continúa aproximándose…
Intento tranquilizarte y digo:
“no tengas miedo, nada va a separarnos”
Corre viento.
De la fogata salen chispas.
El animal está muy cerca.
Repito, “nada podrá separarnos”.
Las chispas vuelan.
La mirada del animal se pierde.
Las chispas lo atacan.
Al animal le teme al fuego.
Dices “te quiero”.
El fuego crece.
El animal nos observa.
Las llamas lo rodean.
El animal siente miedo y escapa.
Nuestras miradas se encuentran.
Podemos ver el fuego en los ojos del otro.
Es el amor que sentimos.
Miramos la fogata… Pero nunca existió.
Comprendemos lo ocurrido,
Y con un beso termina nuestra aventura.
Fuego animal
Fuego animal (Publicada el martes 25 de mayo de 2004)
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