Por las noches ya no duermo. El día entero me dedico a esperar algún tipo de respuesta. Solo escucho el silencio. Me mantengo a flote en este mar de sufrimiento. Mareas altas y mareas bajas intentar ahogar mis penas. Canciones que me hacen recordarte suenan a mi alrededor. Tengo una herida abierta en el centro del pecho. Una herida profunda que quedó cuando me robaste el corazón. Soy un alma en pena que deambula por la vida preso de un sentimiento. Ese sentimiento que despertaste en mí, tiempo atrás. Un fuerte vínculo que nos une, pero a la vez nos separa. Dos senderos que el destino decidió unir. Sus métodos son misteriosos, ya que después de permitirme amarte quiere separarme de vos. Ya no podré abrazarte por el simple hecho de sentirte entre mis brazos, ya no podré acariciar tus manos para que me sientas a través de tu piel, ya no podré mirarte porque tu has decidido dilapidar las oportunidades de aceptar este amor, que me todavía me mantiene deambulando por la vida preso de un sentimiento.
(28/10/05)

No hay comentarios:
Publicar un comentario